jueves, 13 de noviembre de 2008

Entrevista a Luis Marambio

Profesor de Comercio Exterior de Centro de Información Técnica Esucomex.

audioeconomia

miércoles, 12 de noviembre de 2008

¿CHILE EXPORTADOR DE GAS?

Según la revista “Gas Magazine”, y citando un informe oficial que entregara la ENAP, Chile estaría analizando la posibilidad de exportar gas natural licuado al país trasandino a mediados del próximo año cuando la planta de regasificación del mismo gas, en el puerto de Quintero, comience con sus funciones.

Los expertos vislumbran que dicha decisión permitirá invertir la situación que Chile ha vivido durante los últimos años, en el que se ha convertido en un fuerte dependiente de Argentina en dicho e indispensable producto.

La posibilidad de que el rumor se convierta en un hecho, pasa también por los grandes esfuerzos que ha hecho el país vecino por diversificar sus fuentes de energía después de que dicha nación recortara sus exportaciones de gas natural.
En tanto, el proyecto chileno, fue promovido por la ENAP conjuntamente con la distribuidora Metrogas, Endesa, y la británica BG Group, y consiste en la construcción de la infraestructura básica para importar gas natural licuado desde el extranjero y distribuirlo en el mercado interno chileno. El plan constará de un terminal marítimo para recibir buques extranjeros, una planta regasificadora y un sistema de transporte por gasoductos para la distribución en el centro de Chile.

En Quintero, puntualmente, la planta está ubicada a 110 Km, al noroeste de Santiago y su edificación significará una inversión de US$ 940 millones, para desplegar una capacidad anual de suministro de 2.5 millones de toneladas de LNG (siglas en inglés del gas licuado natural). Según el gerente general de ENAP, Enrique Dávila, la planta tendrá una capacidad máxima de 18 millones de metros cúbicos por día, lo que favorece la posibilidad de llevar a cabo esta paradoja de exportar gas al país trasandino durante los próximos dos años. A su vez, se pronostica que el gobierno debería llegar a un acuerdo de canje que garantice las exportaciones a Argentina después del 2009, a cambio de garantías que aseguren la importación de gas argentino hasta que la planta se encuentre en funcionamiento.

La supuesta exportación de gas traería consigo enormes posibilidades de que Chile supere su actual crisis energética iniciada en el 2004, cuando Argentina, quien es además su único proveedor de gas, comenzó a reducir sus exportaciones para satisfacer su demanda local.

A mediados del próximo año, cuando la planta comience con sus primeras producciones de gas, se comprobará esta paradoja que deja perplejos a muchos pero concientes también de que la de llevarse a cabo, le significaría a Chile la posibilidad de superar una crisis local y además de convertirse quizás, en un nuevo proveedor de gas natural a nivel regional.

lunes, 3 de noviembre de 2008

El ataque gringo a las naciones exportadoras


Cuando la crisis subprime se hizo un hecho en el comercio estadounidense y luego a nivel mundial, al menos hace un par de meses (aunque se dice que la crisis se gestó a mediados del año pasado), se previó que el panorama futuro y actual, por estos días, no podría ser sino una crisis financiera y económica. Las consecuencias de ésta hasta ahora, se pueden ver claramente en las innumerables crisis financieras; nacionalizaciones bancarias; reiterativas intervenciones de Bancos centrales en las principales economías desarrolladas del mundo; los profundos descensos en las cotizaciones bursátiles, y un evidente deterioro de la economía global, la que se encuentra en recesión hasta un nuevo aviso.
En el caso de Chile, principal exportador de cobre en el mundo y abastecedor de fruta y productos del mar a nivel mundial, el panorama no es para nada favorable. El mayor problema, según José Luis Mardones, presidente del Banco Estado, es que existe una probabilidad muy alta de que la demanda de productos y materias primas en el mundo disminuya, por lo que Chile bajaría considerablemente sus índices de exportación manufacturera y de recursos naturales, bases de la economía nacional.
Por otro lado, la crisis afecta directamente a la pérdida de confianza, no tan sólo en el sector de alto riesgo subprime, sino que ésta misma puede llegar a traspasarse directamente a empresas y bancos, afectando las tasas de interés y préstamos, incrementando el riesgo financiero.
La crisis puede ser vista también desde una perspectiva positivista, pues el negocio en materia bursátil puede resultar beneficiado si es que los movimientos aumentan, tal como manifestara Guillermo Tagle, ejecutivo de IM Trust, “los mercados volátiles son buenos para las corredoras de bolsa”. En ese sentido, Chile se diferencia de los demás países que confían sus economías en las exportaciones, pues ha demostrado solidez, ya que sus índices bursátiles respaldan los fundamentos nacionales con un buen funcionamiento a pesar de las dificultades y de las precauciones que se han debido tomar.
Similar es el caso de países que al igual que Chile, se nutren de las exportaciones de materias primas o productos elaborados dentro de la industria local. En el caso argentino por ejemplo, los complejos de soja se vieron afectados con una fuerte baja en los precios, a nivel nacional y precio exportador, hecho que pone en jaque las expectativas de quienes transfieren dicho producto a los mercados internacionales. Lo mismo ocurre con Colombia y su café, que desde principios de junio de este año experimentó una caída en los precios y exportaciones del producto en casi un 20% con respecto a cifras de la fecha del año anterior.
La crisis norteamericana que ha trascendido sus fronteras, para muchos injustamente, llegando hasta nuestro país incluso, último puerto exportador y del mundo, ha afectado indudablemente a quienes se dedican a la elaboración o explotación de productos provenientes de tierras nacionales, frustrando el anhelo de seguir alcanzando niveles de antaño.